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(De)Salinizando el mar

Generalmente, uno no se pregunta sobre el origen del agua en las ciudades que visita. Sin embargo, al estar en Barcelona, la presencia de carteles por toda la ciudad con mensajes “Emergencia por sequía” pueden llevar a reflexionar sobre esto. Esto se debe a que Cataluña está experimentando una de las sequías más extensas en su historia.

Escasez del agua

La crisis del agua es uno de los desafíos más preocupantes de nuestro tiempo, afectando a aproximadamente 2.4 mil millones de personas en todo el mundo. En las últimas dos décadas, la disponibilidad de agua dulce por individuo ha disminuido en un 20% (United Nations, 2023). Este problema no se limita a una nación o ciudad específica. ¿La causa? La disminución de las precipitaciones y las prolongadas olas de calor, fenómenos asociados al cambio climático.

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¿Pero la tecnología puede ofrecer una solución al problema de la escasez del agua? 

Para muchos, la respuesta es un sí rotundo. La desalinización del agua, que en términos simples implica convertir el agua salada de los océanos en agua potable, se ha propuesto como una solución ante la escasez y reducir la probabilidad de un "día cero". Estados Unidos y España ya son ejemplos de países con plantas desalinizadoras operativas (iAgua, 2024).

Tecnología

Las principales tecnologías desalinizadoras son las basadas en membranas y las térmicas. En el caso de las tecnologías de membranas, la desalación por ósmosis inversa es destacada por su uso de altas presiones. Por otro lado, las tecnologías térmicas emplean energía térmica para evaporar el agua de mar y luego condensarla para obtener agua dulce.

(De)salinización: desafíos e impactos

Puede parecer lógico que, dado que aproximadamente el 98% del agua en la Tierra es agua salada, ¿por qué no desalinizar toda el agua que necesitamos? Aunque la desalinización del agua se ha considerado como una solución frente a la sequía y ya existen más de 18,000 plantas desalinizadoras operando en alrededor 177 países, hay opiniones divergentes sobre cuál sería la estrategia óptima para hacer que una ciudad sea más resistente ante a la escasez de agua.

En un futuro cercano, quizás la mayoría del agua que consuman tanto los residentes como los turistas en Barcelona será desalinizada del mar. Imagínate, mientras un turista disfruta de un refrescante vaso de agua dulce frente al Mediterráneo, ¡ni siquiera se dará cuenta de que proviene del propio mar que está contemplando! #desalinización #aguapotable

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Colección

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